voces
jueces
lunas
machos
fieras
calma
piensas
pan
violetas
juntos
muerte
pereza
esperanza
verde
huellas
sal
jugando con tus ojos
vigilando los míos
sujetando los recuerdos
aumentando mí fe
si he de morir
pensaré en el camino
en tus besos,
en los días de amor,
en las noches de placer,
en las angustia de dejarte,
en la esperanza del volver,
en el dolor de viajar sin ti,
en la agonía de perder tu olor,
en el desastre que dejaré,
en tu noches de dolor
aunque moriré
por ley de vida
hoy te amaré
como si fuera el último día
sentirás mis miedos
jugarás con mi pelo
lucharás con mi cuerpo
y en silencio te diré
cuanto te quiero
cuanto extrañaré tus movimientos
el perfume de tus besos
la entrega de tu cuerpo
el deseo bueno
la incredulidad de nuestro amor
la perfección de nuestras épocas
el complemento de nuestros tiempos
así sentiré mi partida
la muerte es segura
el amor es consecuencia
la perdida una necesidad
el dolor un propósito
la despedida una regla
y la nostalgia lo que te quedara de mi
a que mis palabras duerman
un sueño eterno
al olvido de tus besos
a la inmovilidad de mi voz
al destierro del amor
a verte sufrir
y perderte en otros brazos
al poco aire
al ahogo de los deseos
a transmutar sin ti
a volar en el infinito
sin hogar donde dormir
a descansar en tumba fría
sin que una lágrima
se evapore en el silencio
a que tu olvido sea eterno
y mi paso por tu cuento
sea un fin abierto
a dejar de sonreír
a olvidar amarte
a perderme en el horizonte
en una tarde en Madrid
a lo desconocido
a querer verme en el abismo
a las cuentas que daré
a los pecados que guardé
a dejar de existir
a no concluir mis versos
y a vivir sin mi