jueves, 30 de julio de 2009

Libre

para amar a mi medida

para crecer, multiplicarme

y seguir viva

para ahuyentar los espíritus enemigos

y desear tu cuerpo en una copa de vino


hay libertades ocultas

quiero la mas pura

la del viento

la del mar

la de los imposibles

la que duele mas


¡¡Ven Libertad!!

búscame en la noche tibia

y calma esta ansiedad

llévate las cadenas

que amaran mi soledad

regálame unas alas para volar…

martes, 28 de julio de 2009

Recuerdos

A un silencio que no entendio mi amor...

tu voz inutiliza mis sentidos
esos del recuerdo
donde los olores y sabores
entorpecen mis miedos

a veces pienso en tu aliento
ese que alborota mis cimientos
aquellos besos fueron eternos
porque aun rondan mis sueños

que será de mi tranquilidad
si los silencios son más
ruidosos que tus versos
los que cuelgo en mis espejuelos
para no dejar de leerlos

quiero ser lo que tu quieras
una revolución o indulgencia
una bruja o hechicera
ser lo que te apetezca
una manzana o una fresa

miércoles, 15 de julio de 2009

Catarsis

A penas habían transcurrido quince años de no respirar en aquella casa de urbanización. Solía estar muy abierta todas sus ventanas de par en par y el movimiento en su interior era obligatorio. Por mas que nos prohibía caminar con el piso mojado o entrar con los tenis sucios no había forma de silenciar nuestros pasos. Las herramientas del soberano viajaban por cada rincón de la casa sin esperar ser cambiadas. Ese silencio de querer ser más ruidosas que su trabajo se anulaba por la necesidad de verlas en un lugar táctico. Las tácticas también tienen su silencio apocalíptico y dramático. Hubo muchas que vi, deje pasar y nunca entendí su importancia. Hay de nuevo un silencio que nunca dejará de serlo.

Hay muchos silencios en este hogar. No escucho su latido ni mi perro. Es casi una pista surrealista de música europea de lo que fue un día. Pues que será de aquel tocador sin ser tocado. O de aquella lámpara azul marino sin ser prendida. Todo ha quedado en un silencio mortal. Su último latido fue sinónimo de silencio eterno. Su cocina no tiene sonidos. Los trastes y los platos permanecen en espera de ser despertados por las ligerezas del que cocina. Hay pocos silencios turbios y este es uno de ellos. Como saber cual será su pena si nadie los libera de su mordaza quinceañera. Los silencios de esta casa siempre fueron silencios; aunque parezca que nunca existieron.

En las noches escuchaba detenidamente los ruidos de las puertas, del cemento caliente enfriarse, de los cordeles de ropa moverse por el viento y de mi perro en la ventana de mi cuarto. No se cuantos ruidos más destruían mi ingenuidad pero creo que no fueron muchos. Hay tantas canicas en el patio, miles de bolas de baloncesto y muchas hojas secas de mi árbol de corazones. Recuerdo los sábados en la tarde cuando el sol en decaimiento se alejaba de mí patio y podía jugar en silencio a ser adulta. Mi perro me facilitaba el papel de mamá moviéndose incansablemente dentro del coche de mis muñecas.

Por cierto, este sí que fue un gran silencio entre mi madre y yo. Las muñecas no me gustaban pues eran muy calladas frías y sus ojos parecían las canicas de mi hermano. Justo cuando deseaba un carrito o un juego de acción en Reyes; llegaban muñecas Barbies, bebés que tomaban biberón y no tenían pelo o las famosas muñecas de porcelana que no podía tocar. Este silencio fue muy agobiante para mí. Ella veía mi rechazo a esas plásticas de naturaleza y discretamente cosía vestidos, lazos y zapatos para las pobres muñecas abandonadas por mí. Nadie entendió el silencio de mi rechazo; era mas realista que muchos adultos y la pena de tener que devolverlas a su cama era inmensa. Solo quería una muñeca que se moviera, llorar y pudiera escapar de mi coche para poder explicarle que era mi bebé. Y que me ayudaría a poder entender el rol que me depararía el futuro y que aun no juego.

Son tantos los ruidos y silencios de estos años que pudiera escribir días y días sin parar. Hubo un silencio que seco una parte de mi vida. Este silencio surgió sin esperarlo muy lentamente entre telarañas y olvidos. Llego la sordera de un amor tan grande como el fraternal. Su escape fue huir de los ruidos y peticiones de madurar; y su ley marcial contra mi fue su silencio. Su necesidad de encontrarse y auto realizarse me costó ocho años de espera.

Una mañana como otra cualquiera para no molestar a mi esposo a las seis de la mañana recurrí a la computadora para leer el periódico online. Descubrí que a mi recién estrenada cuenta de Facebook enviaron un mensaje en inglés muy elocuente y estruendoso. You are my husband’s sister? Oh my God!!! No pude creer lo que leía y regrese a la cama. Con la intención de descubrir que seguía dormida y que solo había sido un sueño ligero. Pues no, realmente seguía despierta, atontada, incrédula y sorda. Entonces brotaron las lágrimas que nunca pudieron surgir en todo este tiempo. Hubo un tsunami de emociones invadiendo mi tranquilidad. Permanecí abatida, triste, llorosa y sobre todo muy enojada por varias horas. Y creo que fue el coraje mas intenso que había sentido en mi vida después de haberme enterado que tendría un silencio perpetuo al apagarse la voz de quien me arrulló en mi niñez. Esa sensación de sordera permaneció intacta por más de dos semanas y los mensajes no cesaban. Inútilmente luche contra mi instinto de hermana. De querer terminar con este silencio y reproducir su voz en mi tímpano. Creo que fue más curiosidad que deseo porque el tiempo transcurrido no pudo silenciar su ruidosa guitarra en mis recuerdos.

Un elocuente silencio por H.H.

Existen silencios que dicen mucho, hay silencios callados y hay silencios que nada esconden mas que el desdén. Y cada persona hace de su silencio una forma de comunicación. No me acabo de acostumbrar al silencio pero son ya muchos años escuchando el silencio en todos sus modos y maneras. Los he percibido todos y nada en claro he sacado de ellos. No se cuando me he equivocado y cuando he acertado al interpretarlos. Pero poco importa. Cuando existe la sinceridad el silencio no es un problema. El silencio solo es un problema cuando es la consecuencia lógica de aquello que se promete y que no se puede cumplir. El resto de silencios obedecen a motivos mas circunstanciales que emocionales, y solo la inseguridad los hace decantarse a una parte u otra de nuestros miedos o frustraciones. En un mundo tan lleno de ruido, encontrar el silencio puede ser un tesoro. No se necesitan palabras sin sentido, bonitos propósitos, o mentiras para limpiar la conciencia. Es mejor el silencio. El silencio bien entendido es símbolo de pureza y de fortaleza, pero es difícil llegar a manejarlo viviendo rodeado de tentaciones, temores y dobleces. De todos modos, el silencio mas doloroso es el impuesto, el no deseado. Se quisieran a veces decir tantas cosas, pero alguien no quiere escucharlas, y la caja negra dice..."no le interesan, o le aborrecen"....espejismos del silencio en un laberinto de palabras,...creemos saberlo todo de todo, y algo aprendemos con el tiempo y la experiencia, pero no la totalidad. Serán muchas las veces que todavía nos equivocaremos, y serán otras tantas en las que nuestro pensamiento será certero como una flecha; pero nos quedaremos con la duda....o con la certeza?. Nadie sabe y nadie contesta. Este es un mundo aparente, muy aparente. Pocas cosas aguantan el paso del tiempo, los colores se apagan, las hojas se secan y las flores se marchitan...tan solo lo indestructible que hay en nosotros permanecerá para siempre para quien quiera escucharlo. Habrá quien no escuche mas que lo que quiera escuchar, y habrá quien desee escuchar lo que nunca le dirán. Y todas sus vidas se cruzarán en un caos ordenado de cuerpos en movimiento. Y nada quedará en el tiempo, nada nos sobrevivirá, salvo el silencio.

jueves, 9 de julio de 2009

Silencios

cuál silencio será peor
el de tu voz o el de mi corazón
hay mil latidos perdidos en sueños
tantas notas musicales en espera
memorias sublimes de una pasión silente
viuda de realidad, herida de muerte

cuántos silencios tendré
cuántos silencios tendrás
tantos como ruidos acumulados
risas, canciones, conflictos,
veredas, caminos sucios, ventanas secas
lágrimas, recuerdos legítimos, mentiras
verdaderas, realidades opuestas, amores viajeros…